Entrevista a Jaume Segalés, ABC Punto Radio (I)

“Los métodos modernos te alejan del cliente en la radio”

Cuando mi buen amigo Gonzalo Estefanía tuvo el detallazo de llamarme para formar parte del equipo de verano del programa “De costa a costa” (otro nombre clásico en la historia de la radio española, asociado a Luis del Olmo) bajo las órdenes de un tipo tan genial, y ocurrente, tan culto, tan cercano, como Juanjo de la Iglesia, conocí de cerca la redacción –entonces- de Punto Radio (hoy ABC Punto Radio) en la calle Juan Ignacio Luca de Tena, de Madrid. Pero llegué a mediados de julio del año pasado, justo cuando comenzaba el turno de vacaciones de los ‘titulares de plaza’. Luis se marchó a descansar. Y también mi invitado. Creo que lo vi una tarde, fugazmente, enorme, muy alto, poderoso, al final del pasillo, saludando a la gente. Pensé: tengo que acercarme a saludarle. Pero al final, la tarea, siempre absorbente en los preámbulos de un nuevo programa, me despistó de mi propósito inicial y Jaume terminó por marcharse de la emisora. Jaume ha sido durante muchos años la sombra de Luis, casi su ‘alter ego’. Y los lectores de este blog saben de sobra que siento un cariño especial, devoción diría más bien, por “los doses”, los sustitutos, porque yo me he considerado siempre parte de este club.   Jaume Segalés es un profesional que conoce el oficio, transmite cercanía, familiaridad, y solidez. Lo que cuenta sobre esta profesión, tan enferma por la crisis, está repleto de lucidez, e invito al lector a reflexionar con sus pensamientos.

Segalés ha tenido la suerte de seguir
 el "Máster Luis del Olmo" de Radio

-Has ejercido de jefe de deportes de Onda Rambla durante 10 años, y de informativos durante otros dos, has hecho programas nacionales, locales, has sustituido a Luis del Olmo durante sus veranos, formas parte del equipo fundador de Punto Radio, has hecho casi de todo en radio… ¿te consideras un todoterreno, Jaume? ¿Y qué significa esto, en positivo?  

-Sí, puedo considerarme un todoterreno, para lo bueno y para lo malo. Positivo: que te puedes adaptar a cualquier situación, que te atreves con todo y que, en un momento como el actual, lo lógico sería que cualquiera podría ofrecerte un puesto de trabajo digno. Lo malo: que te consideran poco especializado, nunca te haces reconocido y reconocible por algo por parte de los oyentes y los comerciales, que son los que te ponen una etiqueta y con ello vas tirando. Mi etiqueta, ahora, parece que vuelve a llevarse, porque con la crisis, la gente quiere personal barato y multifunción.

Los secretos del maestro

-La formación en radio, hoy día, se aprende a través de carísimos másteres, y con suerte, en una sucesión de prácticas. Tú has tenido la enorme suerte de estar cerca, durante más de veinte años, del maestro Luis del Olmo, que esta temporada ha decidido cerrar una etapa y abrir otra, más tranquila. ¿Cuál es la enseñanza de Luis que refrescas cada vez que te pones delante de un micrófono, Jaume? El secreto de Luis, que no sé si es contagioso, ¿es que no ha perdido nunca la ilusión, ni la pasión por el medio?

-Luis siempre dice que, si tienes la información sobre algo, tienes que contarlo, aunque moleste a tus amigos, tus jefes o al partido político que mejor te caiga. Él rechaza de plano la mentira, el dormirse y llegar tarde al puesto de trabajo, y el mal compañerismo. Además, cuando hay polémicas como ahora o como en los años 90, con mucho ruido mediático, te dice: cuando te insulten o critiquen por la derecha y por la izquierda al mismo tiempo, es que vas por el centro. Y ahí es donde está la gente. Uno de los secretos de Luis es que nunca pierde la ilusión, aunque caigan chuzos de punta. Le he visto capear temporales muy gordos con mucha serenidad, algo de lo que adolezco, porque salto en seguida, tengo que aprender a controlarme. Otra cualidad de Luis es que sabe siempre lo que gusta a la gente: al empresario, al autónomo y a la ama de casa. Un espacio de humor o una entrevista que él detecta que es elitista o, al revés, chabacana, en seguida lo corta porque sabe que eso no gusta a su gente.

Segalés en la redacción de Punto Radio,
situada en el edificio del ABC

-El “doble sentimiento encontrado”

-Estás en una cadena privada, que vive exclusivamente de la publicidad, y en las circunstancias que todos conocemos, nada favorables, desde luego. ¿Sientes el peso de la responsabilidad en este sentido? ¿Celebras cuando la pauta de publicidad viene cargadita de cuñas y microespacios?

-Hombre, no te negaré que uno siente un doble sentimiento encontrado cuando ve la pauta saturada de cuñas y micros: primero, de vértigo y sufrimiento, porque vas a tener menos minutos para contenidos y porque hay peligro de que los oyentes desconecten. Pero por otra parte, miras la nómina de tus compañeros y la tuya, y piensas que seguirá llegando el próximo mes. De todos modos, antes sí que con Luis éramos muy responsables en este tema, y nos implicábamos al máximo en la captación, gestión y relación con los clientes. Ahora nos apartan más porque los métodos modernos de agencias, incluso en la propia radio, te alejan del cliente. Y,  bueno, creo que al final volverá lo antiguo... De momento, estamos en nuestro puesto y cada cual hace su trabajo.

-Una de tus grandes cualidades, permíteme, Jaume, es cómo haces tuya la publicidad, cómo la integras en tu programa, convirtiéndola casi en un contenido más del show… ¿qué puedes decirles a los periodistas que en otras cadenas prefieren no contaminarse por los mensajes comerciales, porque creen que les resta mucha credibilidad?

-Es cierto que la publicidad te resta credibilidad, pero hay formas de hacerla para que incluso te la enriquezca. El equipo de Paco González y Pepe Domingo Castaño, sin ir más lejos, ofrece un show con la publicidad que es digno de escuchar. A veces memorizas más, fíjate, la sintonía del producto que el gol que ha marcado un equipo. En eso, son mucho mejores que los demás. En los micros diarios de grandes programas, me gustaba cómo lo hacíamos con Luis, porque éramos cinco o seis compañeros y él no se mojaba. Nos citaba la marca y nosotros anunciábamos el producto. A renglón seguido, cambiábamos de contenido. Así, era como una familia en la que cada cual tenía una credibilidad con sus temas y con sus anuncios.

-¿Y ahora?

-Ahora Carlos Herrera lo hace magistralmente. Eso, en empresas pequeñas no nos sale del mismo modo. Y, luego, si un grande como Del Olmo, Pepe Domingo o Herrera hacen un guiño curioso con un cliente, éste se emociona. Yo he hecho guiños parecidos que luego ha retomado el jefe… y los comerciales y los jefes me han reñido porque eso, defendían, no gustaba al cliente; hasta que luego, al hacerlo con Luis, hacían palmas con las orejas. Así somos todos: el Star System hace que, solo unos pocos puedan innovar. Pero pese a ello, aconsejo a todos que traten de innovar, que busquen la complicidad con el cliente. Venderá más, estará más cómodo y el oyente no se le marchará.

La mirada limpia de Jaume Segalés

La marca más consolidada de la radio española

-La marca “Protagonistas” es la más conocida en la radio española. En el EGM es la más consolidada. Ahora, salvo las breves incursiones del maestro Del Olmo, tú eres el que lleva la voz cantante en la cadena con esta marca. ¿Qué importancia le concedes a la marca?

-La marca es fundamental. Tienes toda la razón. Para lo bueno y para lo malo, todos conocen el nombre. Algunos lo relacionan con Luis, y luego, pues lo apoyan o lo rechazan, en función de sus gustos y los de su familia. Ahora, la mayoría de tiempo voy asociado a ‘Protagonistas’ y me siento muy cómodo. Si puedes ganar oyentes en un EGM cada vez más extraño a la hora de distribuir los resultados de las encuestas, pues mejor. Además, Luis repite su entrevista en el programa del domingo, así que seguimos sonando juntos en antena aunque somos ya dos equipos distintos y separados.

Continúa...