El señor de los sonidos: Joan Vidal (RNE Barcelona)

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Joan Vidal en los estudios de RNE en Barcelona (Fotografía Jordi Cotrina) |
- Su reino era una habitación llena de objetos cuya única función era sonar: vasos, tazas llaves, gafas, botellas
O efectos sala, que así se llamaban entonces, porque se hacían en una ídem, o efectos Foley, en honor al neoyorquino Jack Foley, que fue, como ya se adivina, un pionero. En concreto, a Vidal lo contrataron para hacer los efectos especiales de las radionovelas y dramáticos de teatro de Ràdio 4, que suena a trabajo divertido y, confirma el afectado, lo era: un magnífico trabajo. “En aquella época la sede de RNE estaba en el número 1 de paseo de Gràcia, pero para no estar en medio de todo el ajetreo, los dramáticos se grababan en un estudio en una casa de la calle de Urgell, cerca de la Gran Via. Había una sala donde estaban los actores, otra donde estaban los técnicos y otra habitación en la que estaba yo, donde tenía puertas en miniatura, ventanas en miniatura, suelos diversos, de arena, de madera… Y toda clase de trastos”.
- Había vinilos con sonidos pregrabados de ambiente, el mar, la lluvia, el tren que pasa; lo demás lo hacía él
Vidal llegó en un momento extraño: era 1977, Ràdio 4 acababa de iniciar su andadura y el proyecto incluía la recuperación de un género que en ese momento andaba de capa caída; de hecho, buena parte de los objetos que conformaban su reino Vidal los había heredado de Radio Peninsular, que para entonces había abandonado la producción de dramatizados; en general, lo que ocurrió con la nueva emisora y su apuesta por las radionovelas tenía un poco el aire de un renacimiento, una resurrección. “El hábito de hacer radionovelas aquí, en Barcelona, se había perdido, como se habían perdido también las personas que de una manera puntual habían hecho efectos especiales”, explica. “Y fue entonces cuando aparecí yo”. Vidal lo define como un momento 'pasaba por ahí', la clase de coyuntura azarosa que define una vida: al fin y al cabo, esa etapa duró tres años, pero el resto de su vida Vidal se ganó la vida como técnico de sonido.